Oscar García (APPA Biocarburantes): “España se sitúa a la cola de Europa en consumo de biocarburantes”
Entrevista con
Oscar García
Presidente de APPA Biocarburantes
¿Qué efectos ha tenido sobre el sector la preasignación de cuotas del Ministerio de Industria y cómo se podía haber mejorado aún más?
La puesta en marcha de la asignación de cantidades de biodiésel en mayo de 2014 ha tenido un efecto claramente beneficioso para la industria española de biodiésel, que ha visto aumentar desde entonces su producción, su cuota del mercado nacional y su ratio de actividad, lo que le ha permitido incrementar su aportación a la riqueza nacional y a la generación de empleo. Estos efectos positivos habrían sido mayores si durante los dos años de vigencia de la asignación se hubieran incrementado los objetivos de biocarburantes, en vez de mantenerse congelados en los bajos niveles establecidos en 2013.
En cualquier caso, es una pena que el Gobierno haya decidido finalmente no prorrogar la asignación por otros dos años adicionales, tal como el sector venía solicitando. Esta decisión va a dificultar enormemente que la industria española de biodiésel pueda consolidar la mejoría experimentada estos últimos años, afianzar su competitividad, continuar innovando, seguir creando riqueza y empleo, y contribuir al desarrollo industrial, a la diversificación energética y a la protección del medio ambiente.
¿Han vuelto a abrir plantas de biocarburantes que habían tenido que cerrar temporalmente?
Efectivamente. Uno de los efectos que ha tenido la asignación de cantidades de biodiésel es el de permitir la reactivación de plantas que estaban paradas o funcionando al ralentí. La decisión del Gobierno de no prorrogar este mecanismo podría llevar de nuevo a la parálisis a algunas de las plantas que han conseguido salir adelante estos últimos años.
¿El consumo de biocarburantes en España por parte de particulares y empresas en qué momento se encuentra? ¿Están colaborando las grandes petroleras con estaciones de servicio en su desarrollo?
Al igual que en el resto del mundo, el consumo de biocarburantes en España viene fundamentalmente marcado por los objetivos obligatorios fijados por la legislación. En el caso español, el consumo de biocarburantes alcanzó su mayor nivel en 2012 pero cayó en barrena a partir del año siguiente como consecuencia de la grave rebaja de objetivos aprobada por el Gobierno a principios de 2013.
Con los objetivos congelados en 2014 y 2015, el consumo en España apenas ha crecido estos últimos años, situándonos a la cola de los países europeos en términos relativos. Aunque el objetivo global de biocarburantes se ha incrementado algo para 2016, el aumento es tan modesto que no es previsible que el consumo crezca este año de manera apreciable en España. Las grandes petroleras vienen consumiendo biocarburantes en España básicamente en mezclas bajas con gasóleos y gasolinas, sin que desgraciadamente hayan apostado por incorporar a sus estaciones de servicio mezclas con mayores contenidos de biocarburantes.
La importación masiva de biocarburantes de países extracomunitarios como Indonesia y Argentina ha sido una losa para el sector ¿En qué momento se encuentra esta importación y qué debería hacer la UE para frenarla?
La importación masiva de biodiésel procedente de Argentina e Indonesia provocó efectivamente graves daños a la industria española entre 2010 y 2013. Esta sangría sólo se consiguió parar con la aprobación a finales de 2013 de medidas antidumping contra dichas importaciones por parte de la Unión Europea, tras una denuncia interpuesta por la industria europea.
Estas medidas están siendo hasta ahora muy eficaces para evitar estas importaciones con dumping, por más que existe el riesgo de que esta situación pueda cambiar en los próximos meses en función de las decisiones que adopten sobre este asunto tanto la Organización Mundial de Comercio (OMC) como el Tribunal de Justicia de la UE.