Biomasa
Las plantas de Puertollano y Huelva de Ence supondrán un incremento del 44% en la generación de energía renovable

Ence Energía y Celulosa registró unas pérdidas netas de 12 millones € en primer trimestre del ejercicio 2020 como consecuencia de los precios de la celulosa, los más bajos registrados en los últimos 10 años. Por contra, la productividad y los costes de la compañía tuvieron una importante mejora tras las inversiones llevadas a cabo.
En Energía Renovable, la recepción de las nuevas plantas de biomasa de 46 MW en Huelva, el pasado 31 de enero, y de 50 MW en Puertollano, el 31 de marzo, supondrá un incremento del 44% en la generación de energía renovable. Estas dos plantas han supuesto una inversión total de más de 200 millones €.
Este primer trimestre del año ha estado condicionado por la crisis creada por el Covid-19 a nivel global. El suministro de celulosa y la generación de energía renovable, principales actividades de la compañía, son fundamentales en la actual situación para el abastecimiento de material higiénico y sanitario, así como para el funcionamiento de hogares y centros sanitarios y hospitalarios.
La aplicación temprana y rigurosa de los protocolos internos de Ence para prevenir y minimizar los riesgos de contagio en las personas y operaciones, ha permitido a la compañía mantener operativas todas sus plantas y mantener íntegro el empleo.
La actividad de Energías Renovables de la compañía genera en torno a 11.500 empleos de forma directa, indirecta e inducida en Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura.
La compañía cuenta, además, con 405 MW de renovables en cartera, con acceso a red y localización aseguradas, cuyo desarrollo se encuentra a la espera de la implementación del Plan Nacional de Energías Renovables. Estas futuras inversiones generarán empleo industrial y rural de calidad, que contribuirá a superar la crisis económica provocada por el Covid-19.
Agrobioheat, un proyecto que aprovecha la energía de los sarmientos
Agricultores de Castilla-La Mancha participaron en unas jornadas demostrativas del proyecto europeo Agrobioheat para la valorización energética de los sarmientos
Empresas, bodegas y agentes de desarrollo rural españoles y europeos se dieron cita en Vilafranca del Penedès en unas jornadas demostrativas del proyecto europeo Agrobioheat, una iniciativa que promueve el uso eficiente de la agrobiomasa para obtener energía en la Europa rural.
Según Manolis Karampinis, investigador del Centre for Research and Technology Hellas y coordinador del proyecto Agrobioheat, se ha elegido Vilafranca como sede de la tercera reunión de trabajo y de estas jornadas informativas por ser un referente europeo en la valorización energética de los sarmientos, cuyo modelo puede replicarse en otros lugares.
Karampinis ofreció datos sobre el enorme potencial de los sarmientos como biocombustible en el continente europeo y mostró casos de éxito de toda Europa. Por su parte, Laura Carbó, técnica de medioambiente del ayuntamiento de Vilafranca, presentó las exitosas experiencias locales que comenzaron con el proyecto VinyesxCalor.
El evento contó con la presencia de cincuenta participantes, provenientes de diferentes Comunidades Autónomas–como Castilla-La Mancha, La Rioja, País Vasco, Andalucía o Castilla y León- así como de otros países europeos – Grecia, Eslovenia, Italia o Rumanía- donde la superficie de viñedo es importante. Entre ellos, representantes de bodegas, cooperativas, ingenierías, fabricantes e instaladores de calderas, agencias de la energía y grupos de acción local asistieron a estas jornadas.
Cómo aprovecha Vilafranca la energía de los sarmientos
El ayuntamiento utiliza las podas de los viñedos para alimentar una caldera de biomasa que abastece a una red de calor municipal en el distrito de “La Girada”. La red calienta varios equipamientos municipales desde 2018. En la actualidad, la Empresa Municipal d’Aigües de Vilafranca (EMAVSA) se encarga de la gestión de la red de calor.
El aprovisionamiento de sarmiento a la red de calor lo realiza la cooperativa vitivinícola “La Granada” que, entre otros servicios a los agricultores asociados, ofrece el de recoger la poda de las viñas por un coste inferior al de realizarlo de manera individual.
Ilustración: J.C. Florentino
Veolia Biomasa España produjo 80.700 toneladas de biomasa procedentes de astilla forestal
Muchas de las zonas en las que trabaja Veolia Biomasa España se encuentran en Castilla-La Mancha, concretamente, en la provincia de Cuenca
Veolia, en 2019, consiguió producir 80.700 toneladas de biomasa, un 3% más que el año anterior, a través de su filial Veolia Biomasa España.
Muchas de las zonas en las que trabaja Veolia Biomasa España se encuentran en Castilla-La Mancha, concretamente, en la provincia de Cuenca. El caso más reciente son las labores de limpia y aprovechamiento de la biomasa en el municipio de Barchín del Hoyo, donde tuvo lugar un importante incendio el pasado verano. La corta y retirada de la masa forestal calcinada es primordial para facilitar la regeneración y la recuperación del medio.
Veolia Biomasa España nació en 2010 con el objetivo de trabajar con un combustible limpio y medioambientalmente sostenible como es la biomasa. Además, trabaja en distintas zonas de España creando fajas y áreas cortafuegos, mediante cortas dirigidas y limpias de masa forestal, que permitan facilitar las labores de protección y extinción en caso de incendio.
Precisamente, la astilla forestal generada a raíz de estos trabajos de limpieza de los bosques se utiliza para la producción de energía térmica en las instalaciones de Veolia destinadas a viviendas e industrias. Una de las principales redes de calor de biomasa de Veolia es Móstoles Ecoenergía, una central ubicada al sur de Madrid que abastece de calefacción y agua caliente sanitaria a 2.500 viviendas en Móstoles. Esta red de calor reduce un 15% el coste energético de los vecinos a los que da servicio y evita la emisión de 9.000 toneladas de CO2.
Veolia gestiona también la red de calor y frío con biomasa de Ecoenergies Barcelona, que suministra energía térmica a clientes residenciales, industriales y del sector terciario de Barcelona y l’Hospitalet de Llobregat. Esta red, que integra soluciones 3,7 veces más eficientes que las convencionales, permite un ahorro del 1% del consumo de electricidad de la ciudad de Barcelona y reduce su huella de carbono, ya que evita la emisión de 13.400 toneladas de emisiones de CO2 cada año.
Inaugurada la planta de generación de energía con biomasa de Ence en Puertollano

Ha supuesto una inversión de 100 millones de euros
La nueva planta de generación de energía renovable con biomasa de 50 MW de Puertollano (Ciudad Real) fue inaugurada el pasado jueves 9 de enero. Ence, empresa propietaria, estima que esta nueva infraestructura generará 325.000 MWh/año. Para ello consumirá 238.000 ton/año de biomasa que cumplirá con el Decálogo de Ence para la Sostenibilidad de la Biomasa como Combustible.
El presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, inauguró la nueva planta de generación de energía renovable con biomasa de baja emisión de 50 MW de Ence en la localidad manchega, en un acto que contó con la presencia de la alcaldesa de Puertollano, Isabel Rodríguez García, así como del presidente de la compañía, Ignacio Colmenares, y del presidente de honor, Juan Luis Arregui.
Impacto positivo para el entorno de Puertollano
Según el comunicado emitido por Ence tras el acto de inauguración, la nueva planta de generación con biomasa de 50 MW de Puertollano es un claro ejemplo de transición energética justa. De hecho, destaca por su alta generación de empleo directo, indirecto e inducido (cerca de 27 empleos por cada MW instalado).
La nueva infraestructura producirá una cifra estimada de 325.000 MWh/año, equivalente a las necesidades energéticas de más de 60.000 personas. Para ello, consumirá alrededor de 238.000 ton/año de biomasa, entre la que se encuentra orujillo, sarmiento y arranque de vid, hoja de olivo y restos forestales y agrícolas leñosos.
Compromiso con la sostenibilidad
Toda la biomasa utilizada en Puertollano cumplirá con el «Decálogo de Ence para la Sostenibilidad de la Biomasa como Combustible». Esta iniciativa pretende garantizar su compromiso con la sostenibilidad en la utilización de la biomasa y el aprovechamiento de esta fuente renovable de energía.
Además, la actividad de la planta de Puertollano permitirá una fuerte reducción de la quema incontrolada de rastrojos agrícolas –acto que tiene un alto impacto ambiental–, a la vez que contribuye al sostenimiento de más de 1.300 puestos de trabajo, directos, indirectos e inducidos, la mayor parte de ellos en el ámbito rural. Estos empleos vendrán a sumarse a los 500 empleos directos que han generado la planta durante su construcción.
La nueva planta de Ence en Puertollano ya genera energía renovable

La nueva planta de generación de 50 megavatios (MW) de Ence en Puertollano (Ciudad Real), antiguo emplazamiento de la central de carbón de Elcogás, ya se ha acoplado a la red eléctrica y ha generado sus primeros megavatios de energía renovable con biomasa.
La instalación, que continuará en fase de pruebas hasta finales de enero de 2020, cuando se espera que complete este periodo previo de ensayos y haga su entrada en operación oficial, producirá una cifra estimada de 325.000 megavatios hora (MWh) de electricidad al año, el equivalente a las necesidades energéticas de más de 60.000 personas.
La actividad de la planta de Puertollano permitirá la reducción de la quema incontrolada de rastrojos agrícolas -que tiene un alto impacto ambiental-, a la vez que contribuirá al sostenimiento de más de 1.300 puestos de trabajo, directos, indirectos e inducidos, la mayor parte de ellos en el ámbito rural.
Además, la empresa destaca que la generación con biomasa tiene «innegables ventajas» para el sistema eléctrico, al aportar una fuente de producción energética «renovable, firme y gestionable». No obstante, la limitación regulatoria de 6.500 horas al año de generación en estas instalaciones evita que esta aportación pueda verse potenciada.
Esta nueva planta de generación con biomasa, Biollano 50 MW, que se está construyendo en las instalaciones de la antigua central térmica de Elcogás, constituye un ejemplo de transición de un modelo de generación con combustibles fósiles a energía renovable.
Dada la cercanía de la planta termosolar Termollano, que Ence adquirió a Iberdrola, se está estudiando el potencial de hibridación entre ambas plantas. De contar con el apoyo regulatorio necesario para que sea viable, este proyecto podría convertir un activo renovable no gestionable —que sólo genera energía durante las horas con sol— en gestionable, gracias a la capacidad de la biomasa de producir energía de manera programable, firme y estable, y en momentos de alta demanda.
Más de 4.300 hogares de Castilla-La Mancha se sumaron en 2018 a la calefacción de biomasa
Casi 24.000 estufas y calderas de biomasa de alta eficiencia funcionaban en Castilla-La Mancha a finales de 2018, el 21,8% más que el año anterior, según el Informe Anual 2019 del Observatorio de la Biomasa que gestiona la Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa (Avebiom).
Este incremento de las instalaciones de biomasa tecnológicamente avanzadas, que supone la incorporación de más de 4.300 hogares y edificios de uso colectivo, sitúa el volumen de negocio del sector en 71 millones de euros
La fabricación y comercialización de los nuevos equipos, así como las tareas de mantenimiento y venta de biocombustibles sólidos, entre otras, generaron una actividad que emplea a 794 personas.
En cuanto a la energía consumida por los equipos de biomasa en Castilla-La Mancha, ascendió a 116,6 KTEP, lo que ha permitido el ahorro equivalente de casi 136 millones de litros de gasóleo en 2018.
También es relevante la contribución del sector a la estrategia de reducción de gases de efecto invernadero, ya que los 23.982 equipos de biomasa instalados en la Comunidad evitaron la emisión de 360.528 toneladas de CO2, similar a la contaminación que producen durante un año 240.352 turismos, el 15,9% de todo parque móvil regional.
-Negocio creciente. Según el Informe del Observatorio de la Biomasa de Avebiom, el sector generó un negocio en toda España de 870 millones en 2018 (el 1,7% más), lo que permitió crear 950 nuevos puesto de trabajo (el 11% más), hasta alcanzar la cifra de 9.600 personas empleadas.
Al cierre del ejercicio había 298.400 instalaciones de calefacción alimentadas con biomasa en funcionamiento, 53.480 más que el año anterior.
En opinión del presidente de Avebiom, Javier Díaz, “las labores que se derivan de la producción y comercialización de pellet, astilla, leña, huesos de aceituna y otros combustibles, se asientan sobre todo en el mundo rural, por lo que podemos afirmar que nuestro sector se erige claramente como eficaz antídoto contra la despoblación y el abandono de esas zonas en declive”.
Las casi 300.000 instalaciones de calefacción operativas a finales del ejercicio evitaron la emisión de 4,1 millones de toneladas de CO2 en 2018, “lo cual significa que la biomasa de calefacción se ha consolidado como un instrumento indispensable en la estrategia nacional para la reducción de gases de efecto invernadero, al igual que lo es también en Europa”.
Expobiomasa
Con motivo de los diez años de actividad del Observatorio de la Biomasa en España, Avebiom presentará un informe sobre la evolución del sector y su contribución a la lucha contra la emisión de gases de efecto invernadero procedentes del uso de combustibles fósiles, como el gasóleo o el gas natural, que afectan negativamente al cambio climático. La presentación realizará en el marco de Expobiomasa 2019, cuya duodécima edición tendrá lugar del 24 al 26 de septiembre próximo en el recinto ferial de Valladolid.
Este año participarán en el certamen 500 firmas expositoras procedentes de 30 países, dedicadas a la fabricación de maquinaria forestal, reciclaje de madera, fábricas de pellets, fabricantes de calderas industriales, equipos de cogeneración energética (calor y electricidad), la industria auxiliar, así como las firmas líderes de calderas y estufas de uso doméstico.
La biomasa logra un volumen de negocio de 71 millones y genera casi 800 empleos en Castilla-La Mancha
Aunque todavía de forma tímida, la biomasa continúa ganando terreno en Castilla-La Mancha, aunque perdió algo más de un 5% en volumen de negocio con respecto al año anterior. El sector cerró el año pasado con un volumen de negocio que alcanzó los 71 millones de euros y la creación de 794 puestos de trabajo de los 9.606 que tiene el sector en todo el territorio nacional, según el Informe Anual del Observatorio de la Biomasa elaborado por la Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa (Avebiom).
Con estos datos, Castilla-La Mancha se posiciona en el cuarto lugar más relevante a nivel nacional en lo que al negocio de la biomasa se refiere, tan solo por detrás de Andalucía, Castilla y León y Cataluña. La comunidad líder, Andalucía, el año pasado experimentó además el mayor crecimiento nacional, de un 21,4%, hasta alcanzar una cifra de negocio de 177 millones de euros. La Comunidad andaluza también lideró el número de puestos de trabajo acumulados durante el año, con un total de 1.945.
Además de en Andalucía y Castilla y León, el volumen de negocio de la biomasa creció el año pasado en otras cinco comunidades autónomas, la misma tendencia que experimentó a nivel nacional, donde aumentó un 1,7 por ciento hasta los 870 millones de euros de volumen de negocio. Tras Andalucía, el mayor aumento se dio en el caso de Baleares (19,3%), seguida de Cantabria (11,6%) o Comunidad Valenciana (10,7%).
En número de empleos, Castilla-La Mancha también ocupa la cuarta posición nacional, con un total de 794 empleos. En el caso del número de equipos en funcionamiento, que encabeza Andalucía, con 78.205 (2.305,8 megavatios), seguida por Castilla y León, con 44.755 equipos (1.529,7 megavatios) y Cataluña, con 27.588 equipos (1.152,6 megavatios), Castilla-La Mancha ocupa también la cuarta posición, con 23.982 equipos funcionando (777 megavatios).
Al hacer alusión a la energía consumida, Castilla-La Mancha también se posicionó en cuarto lugar nacional con 116.616 toneladas equivalentes a petróleo (un 9,1 por ciento más que el año anterior). Castilla y León sigue siendo líder a nivel nacional, con 281.607 toneladas equivalentes de petróleo (un 7,2 por ciento más que el año anterior), seguida de Andalucía, con 183.400 toneladas equivalentes (un 10,6 por ciento más), y de Cataluña, con 151.475 toneladas (un 7,5 por ciento más).
Por último, según este mismo informe, Castilla-La Mancha, gracias a las estufas y calderas de biomasa, evitó la emisión de 360.528 toneladas de CO2.
Avebiom pone en marcha el primer sello de Instalador de Biomasa Certificado
La Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa (Avebiom) se suma la tendencia de la mayoría de los países de la UE de garantizar la calidad de las empresas instaladoras de biomasa y ha puesto en marcha el primer sello de ‘Instalador de Biomasa Certificado’ (IBC). “Se trata de una marca que avala la calidad y especialización de las empresas en la instalación, operación, mantenimiento y reparación de instalaciones térmicas de biomasa”, según ha explicado el presidente de Avebiom, Javier Díaz.
“El objetivo es ofrecer al cliente garantías de calidad y control de las instalaciones y poder diferenciar en el mercado a las empresas que ejecutan de forma profesional su trabajo”, ha precisado el presidente de Avebiom durante la presentación de este sello, que tuvo lugar en la sede del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE).
Además, ha indicado que este sello supondrá la puesta en marcha de un registro de empresas certificadas, que estará al alcance de los usuarios, con la posibilidad de que se pueda medir la satisfacción de los clientes mediante un sistema de evaluación directo.
Según las estadísticas del Ministerio de Industria, en España hay más de 30.000 empresas capacitadas para realizar instalaciones térmicas en edificios (RITE). Según estimaciones del Observatorio Nacional de Biomasa, que gestiona Avebiom desde 2009, un 27% de estos ha operado con equipos de biomasa al menos una vez.
En 2017 había cerca de 250.000 instalaciones de biomasa para uso térmico, según los datos de Avebiom. La mayor parte son equipos de pequeña potencia, estufas y calderas de menos de 50 kW para el sector de la calefacción doméstica.
El sello se ha puesto en marcha en colaboración con el Instituto de la Construcción de Castilla y León (ICCL), que actúa como entidad de certificación en todo el territorio nacional.
Para obtener el sello, los instaladores tienen que cumplir una serie de requisitos definidos en la ‘Carta de Calidad’ en cuanto a su organización, el grado de especialización, la experiencia demostrada, las condiciones de prestación del servicio, la respuesta ante el cliente, la disponibilidad de personal técnico cualificado y los recursos materiales disponibles.
Esta ‘Carta de Calidad’ recoge, entre otras exigencias, el compromiso de informar al cliente de las condiciones idóneas en las que debe realizarse la instalación y el mantenimiento, así como el de asesorar para elegir la solución técnica más eficiente; y la obligación de entregar una factura detallada conforme al presupuesto aprobado.
Para acceder a la certificación, la empresa tiene que contar en plantilla con personal técnico de experiencia contrastada y estar inscrita en el registro autonómico de empresas instaladoras.
El técnico, por su parte, tiene que cumplir los requisitos de formación, experiencia y especialización establecidos en el Perfil Profesional aplicable a su especialidad. La organización certificada dispondrá de un procedimiento de atención de quejas y reclamaciones de sus clientes.
Por su parte, el director técnico y responsable de proyectos europeos del ICCL, Felipe Romero, ha subrayado que el objetivo de la certificación es doble. Por una parte “aumenta la profesionalidad de las empresas del sector y, por otra parte, amplía las garantías que ofrecen a sus usuarios mediante el compromiso recogido en una exigente carta de calidad”.
ICCL, como entidad de certificación externa, aporta al modelo desarrollado por Avebiom la garantía de imparcialidad, competencia técnica, transparencia y confidencialidad necesarias a lo largo de todo el proceso de certificación.
En la actualidad ya son cinco las empresas que han iniciado los trámites para obtener el certificado IBC:
-Calor Erbi. Empresa de Servicios Energéticos (ESE) acreditada por el IDAE. Tiene su sede en Ponferrada (León) y opera en Castilla y León, Asturias, Galicia, Castilla-La Mancha, Extremadura y Madrid. Es una compañía comprometida con la calidad de las instalaciones, mediante la formación de sus equipos de instaladores y de la elección de los mejores proveedores de equipos y componentes, y siempre con especial atención a la calidad del biocombustible. De hecho, es una compañía distribuidora de pellet con la certificación ENplus. En la actualidad, Erbi da cobertura a más de 300 instalaciones, principalmente de medios y grandes usuarios.
-Bioloxa. Una compañía ESE acreditada por el IDAE, que desempeña su actividad desde 2015 en Andalucía y Extremadura. Comprometida con la calidad y el medio ambiente, ayuda a las empresas y administraciones a realizar la transición energética y apuesta por una economía verde y circular. En la actualidad da cobertura en modalidad de gestión energética integral a muy diversas instalaciones, principalmente de pequeños y medios usuarios, y trata de promover redes de calor en municipios pequeños con masa forestal cercana o restos agrícolas.
-Gebio. Una empresa ESE integrada verticalmente, con lo que dispone de medios propios para la producción, distribución, ingeniería, instalación y el mantenimiento de sus instalaciones con las que realiza los servicios de venta de energía. Habilitada en el Programa Biomcasa del IDAE, en la actualidad gestiona más de 80 instalaciones de España y Portugal, con servicio propio de telegestión y mantenimiento.
-Calordom. Grupo empresarial de origen familiar, con más de 80 años de experiencia como proveedores de servicios energéticos orientados al mantenimiento de salas de calderas, placas solares o suministros de gasóleo y gas, entre otros. Lleva 30 años trabajando en materia ambiental y es pionera en la implantación de energías renovables en toda España y especialmente en la Comunidad de Madrid. De su actividad cabe destacar el suministro de hueso de aceituna como fuente de energía térmica, combustible que da calor a más de 20.000 familias madrileñas, lo que supone más del 80% de los usuarios finales de la compañía.
-Biomaser. Empresa dedicada al diseño, la instalación y la venta de sistemas de biomasa y energías renovables, con sede en Benavente (Zamora). Opera sobre todo en la Comunidad de Castilla y León, donde ejerce como distribuidora de pellet ENplus A1 Ecofogo. Gestiona más de mil equipos instalados, la mayoría de carácter doméstico, que demanda un producto de calidad y un servicio postventa comprometido.
Las empresas españolas fabricaron 684.000 toneladas de pellets en el año 2018
El 85% del pellet fabricado en España está certificado con el sello de calidad ENplus®, según ha informado la Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa, Avebiom, que gestiona esta certificación desde su implantación en 2011.
Desde 2011 a 2018 se han emitido en España un total de 52 certificados ENplus® con alcance de producción y 26 con alcance de comercialización, lo que sitúa a España entre los países con más empresas certificadas de Europa, junto a Alemania, Austria e Italia. Aunque si se contabilizan únicamente las empresas productoras, España ocupa el segundo puesto europeo, solo por detrás de Alemania.
El pellet es el tipo de biocombustible fabricado con biomasa que ha irrumpido con más fuerza en el mercado nacional durante los últimos siete años, con un crecimiento por encima del 170%, al pasar de las 250.000 toneladas fabricadas en 2012 a las 684.000 de 2018, según las estimaciones de Avebiom.
Sin embargo, en términos de consumo el crecimiento ha sido sensiblemente mayor (por encima del 240%), ya que la estimación de ventas en 2018 asciende a casi 600.000 toneladas, frente a las 175.000 de 2012.
Por comunidades autónomas, en las que ubican las fábricas con un mayor volumen de producción de pellet son: Galicia, donde el 97% del total producido cuenta con el sello ENplus®; Andalucía (96%), Castilla y León (92%) y Cataluña (91%).
En otras comunidades con volúmenes de fabricación de pellet más modestos, como Asturias, La Rioja y Cantabria, prácticamente el 100% del total producido cuenta con la certificación ENplus®.
El presidente de Avebiom, Javier Díaz, ha destacado “el avance tan importante que se ha registrado en España, desde el punto de vista de la calidad del pellet”, valorando de forma muy destacada “la total implicación” de los fabricantes, que incluso “propusieron a Avebiom implantar en 2013 controles más exhaustivos, en lo que han sido pioneros”. Se trata, dijo, “de un sistema de vigilancia adicional a los establecidos en el manual de certificación, que implica la realización de dos auditorías aleatorias no programadas, una en planta y otra en un punto de venta”.
Según ha informado el responsable de la certificación ENplus® en Avebiom, Pablo Rodero, esta medida adicional “ha elevado a 300 el número total de los análisis realizados entre las empresas productoras y comercializadoras desde 2012, sin que hasta el momento se hayan detectado desviaciones graves, salvo un caso que ha supuesto la retirada del sello de calidad y otros cinco en los que se procedió a la suspensión temporal del mismo hasta la corrección de las deficiencias, de acuerdo con los resultados de la auditoría extraordinaria realizada a tal efecto”.
Esta iniciativa, añadió Rodero, que “financian los propios productores y que coordina Avebiom, ha sido muy bien acogida en las asambleas generales del European Pellet Council, que estudia la posibilidad de incorporarla al manual de certificación en una próxima actualización del mismo”. Avebiom cuenta con la licencia de ENplus® y posee los derechos de la marca en España, cuya entidad certificadora es Aenor.
Castilla-La Mancha lidera con Andalucía el uso de biomasa en instalaciones docentes con 47 colegios y 54 institutos
En España operan 375 redes de calor con biomasa, 340 más que en 2010, con una potencia acumulada de 312 MW térmicos, según datos del Observatorio Nacional de Calderas de Biomasa. De ellas, 292 (78%) son redes de calor con biomasa que dan servicio en edificios de uso público. Además, hay otras 78 instalaciones que se encuentran en fase de ejecución, que elevarán la potencia acumulada a 453 MW términos.
La Comunidad de Castilla-La Mancha cuenta con diez redes de calor de las que siete son de uso público y están situadas en Cenizate (Albacete), Las Pedroñeras (Cuenca), Horche y Mazarete (Guadalajara), Gálvez y Villaseca (Toledo).
Además, en Guadalajara se encuentra en construcción uno de los district heating con biomasa más grande de España. Bajo el modelo ESE, la empresa REBI desarrolla este proyecto, que contará con cerca de 20 kilómetros de tuberías, abastecerá de calefacción y agua caliente sanitaria a 6.000 viviendas y a un buen número de edificios públicos e industrias y generará 60 empleos directos e indirectos. El consumo previsto rondará las 25.000 toneladas de astilla al año y se evitará la emisión de 15.000 toneladas anuales de CO2.
Hay que destacar Castilla-La Mancha lidera junto con Andalucía el uso de la biomasa en instalaciones docentes, con 47 colegios, 54 institutos de Educación Secundaria (algunas en fase de construcción) y tres guarderías.
El sector de la biomasa generó en Castilla-La Mancha un negocio superior a los 75 millones de euros en 2017, según los datos del Observatorio de la Biomasa que gestiona la Avebiom.
A finales de 2017 operaban en esta Comunidad 19.679 instalaciones de biomasa (estufas y calderas) tecnológicamente avanzadas, un 23% más que en 2016 y un punto por encima de la media de España.
El mayor número de equipos se encuentra en la provincia de Toledo (5.104), seguida de Ciudad Real (4.323), Guadalajara (3.554), Cuenca (3.595) y Albacete (3.103), con incrementos superiores al 20% en todas las provincias.
El uso de la biomasa ha ahorrado el consumo de 124,5 millones de litros de gasóleo de calefacción y ha permitido una menor emisión de gases de efecto invernadero, que se estima en 330.404 toneladas de CO2, evitando la contaminación que producen en un año 220.269 vehículos, el 15% del parque móvil de Castilla-La Mancha.
Al cierre de 2017 operaban en España 244.197 instalaciones de calefacción alimentadas con biomasa, 46.027 más que el año anterior (23%).
Este mayor incremento de las instalaciones de calefacción con biomasa se ha visto impulsado por la venta de las modernas estufas de pellet, que solo en 2017 se elevó hasta las 42.728 unidades. Esta cifra de ventas, que supone un nuevo récord, representa un incremento anual del 19%.
El presidente de Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa (Avebiom), Javier Díaz, ha pedido recientemente al Gobierno de España un “apoyo más decidido a la biomasa como fuente de energía, con una mayor participación en el mix energético nacional, porque es indispensable para poder cumplir con los objetivos medioambientales establecidos por la UE en 2050”.
La UE ha fijado el objetivo de reducir un 80% las emisiones de gases de efecto invernadero en 2050, respecto a 1990, y ha aprobado el aumento de la aportación de las renovables en el mix energético hasta un 32%.